por Pablo Sieira
Algunos creerán que es para "sentarse y fumar un porrito", pero no. El sistema legal no cambió, lo que cambió fue el nombre de la esquina de Perú y Moreno, que ahora se llama "Esquina Calamaro". En esa intersección hoy hay un mural con las portadas de tres discos fundamentales en la carrera del cantante: "Vasos y besos", de los Abuelos de la Nada, "Sin documentos", de Los Rodrígez y "Honestidad brutal", uno de sus más importantes álbumes solistas. Y el homenajeado estvo allí para agradecer el gesto.
Además de las excelentes reproducciones de las tapas de algunos de sus logros discográficos más importantes, la obra exhibe un breve reseña histórica de cada uno de esos discos, que ya llevan la firma de El Salmón. El mural fue realizado en su totalidad por la productora Santa Paciencia, de Romy Rosello y contó con la colaboración de los artistas plásticos Andrea Florio; Carlos Rovlich y Duy Jaureguiberry.
Durante el evento, Calamaro dedicó su pequeño rincón de Buenos Aires a sus fallecidos compañeros de Abuelos de la Nada, Miguel Abuelo, y de Los Rodríguez, Daniel Zamora. También recordó que sobre la calle Perú grabó un álbum con Raíces y grabó con los Abuelos.
El homenaje llega luego de años de haber tenido en la Capital Federal un juicio por apología de las drogas tras haber expresado durante durante un recital "qué linda noche para fumarse un porrito", en lugar de la frase original la canción "Loco": "voy a salir a caminar solito, sentarme en un parque a fumar un porrito". Anque Calamaro ya haya dejado sus viejas costumbres, la pregunta sale sola: ¿se sentará allí a liar un papelillo y un poco de hierba... y encenderlo?
Foto: ambito.com
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