por Pablo Sieira
A 40 años de su muerte, Jimmy Hendrix sigue deleitando a los melómanos. En marzo salió a la venta "Valleys of Neptune", una recopilación de 12 brutales temas entre los que se encuentran inéditos, covers y nuevas versiones de obras ya conocidas del eximio guitarrista. Con este tributo a su carrera, Hendrix se alza una vez más por encima del común de los mortales y, desde la eternidad, sigue sorprendiendo a cualquier guitarrista con su virtuosismo.
Claro que en el repertorio de este nuevo disco hay nombres conocidos como "Stone free", "Fire" o ese paradigma bluesero que es "Red House", pero Hendrix era tan perfeccionista que jamás grababa un tema dos veces de la misma manera, lo que convierte a estas tres versiones en completamente nuevas. Pero en esta edición destacan joyas jamás escuchadas, como el tema que da nombre al disco, una pista rockera grabada en New York, en septiembre de 1969. Al igual que la mayoría de los tracks que dan forma a "Valleys of Neptune", es un registro del momento más alto en la evolución artística de Hendrix, justo después de la edición de "Electric Ladyland".
Es el caso también del nunca publicado "Ships passing through the night", un psicodélico tema con inlcinaciones al blues, perteneciente a la última sesión de grabaciones de la Jimmy Hendrix Experiencie. Este detalle lo hace brillar aún más, así como "Crying blue rain" y "Lullabilly for the summer", también inéditos pertenecientes a las últimas grabaciones de la formación Hendrix-Redding-Mitchell.
El guitarrista zurdo de Seattle jamás tuvo problemas para tocar algún cover, a los que les agregaba sonidos y fraseos de su propia creación, embebidos en su patriarcal manejo de la distorsión. Este disco tiene dos de aquellos temas: "Bleeding heart", del blues man Elmore James (otro innovador guitarrista) y "Sunshine of your love", del trío Cream (Eric Clapton, Jack Bruce y Ginger Baker). Dentengámonos un instante en este track: en su versión original es la canción psicodélica por antonomasia, así que si hablamos de un cover hecho íntegramente en guitarra y por el genio más delirante que haya tocado ese instrumento, nos referimos a una demoledora de cerebros como pocas. Hendríx solía tocarla en vivo, pero se pensaba que jamás había sido registrada en estudio. Afortunadamente, hoy descubrimos que sí.
¿Y dónde estaban todas estas grabaciones? En un desván, archivadas en cajas custodiadas por la hermana del músico, Janie, directora de la empresa Experiencie Hendrix LCC. Fue ella la que además anunció que tenía material para "los próximos diez años". Habrá Hendrix para rato.
El magistral guitarrista murió el 18 de septiembre de 1970. Por eso se presume que este será el año de Hendrix y, de hecho, habrá una exposición en Londres para conmemorar los 40 años de su muerte. Se extenderá del 25 de agosto al 7 de noviembre y se realizará en la casa donde el músico vivió desde 1968 hasta su fallecimiento. Allí podrán apreciarse manuscritos de canciones, trajes originales y fotos jamás vistas.
Sería aburrido cerrar esta nota con datos biógraficos del músico, ya que casi no hay persona que no lo conozca ni guitarrista que no haya sido influenciado por él o tomado como ejemplo. Y si alguien no sabe quién fue Hendrix, ya lo sabrá, porque él siempre estará aquí. Porque con cada álbum que se consigue en una disquería, con cada edición post mortem, con cada video en la red se reafirma la inmortalidad del Mozart del rock.
Yo creo (y sostengo) que tenés un talento maravilloso para escribir (especialmente) sobre lo que te apasiona. Creo, además, que tenés la virtud de crear frases que podrían ser consideradas míticas como: "jamás tuvo problemas para tocar algún cover, a los que les agregaba sonidos y fraseos de su propia creación, embebidos en su patriarcal manejo de la distorsión". También creo que soy espantosamente reiterativa, pero no puedo evitar dejar plasmado acá aquello de que tus finales son brillantes. Creo que es todo. Por ahora. Ah... felicitaciones por este derroche de creatividad. Y me alegra (mucho) que esté tan bueno el cd de Hendrix ( al menos, eso reflejás... da ganas de escucharlo). Ahora si. Es todo. Por ahora. Na.
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