
“A nuestros fans y amigos: como REM, y como amigos de toda la vida, hemos decidido terminar como banda. Nos alejamos con una sensación de mucha gratitud, de finalidad, y de sorpresa ante todo lo que hemos logrado. A todos los que se sintieron tocados por nuestra música, nuestro agradecimiento más profundo por escucharnos”, señaló el comunicado que tomó desprevenido a todo el mundo. “Espero que nuestros seguidores comprendan que fue una decisión difícil, pero todo debe llegar a su final y quisimos hacerlo correctamente, a nuestra manera", afirmó Stipe.
El bajista Mike Mills agregó: “Hemos tomado esta decisión todos juntos, de forma amistosa y pensando en todos. Simplemente, ha llegado la hora”.
Para concluir, Stipe apeló a una curiosa metáfora: “Un hombre sabio una vez dijo que la habilidad en ir a fiestas es saber en qué momento irte. Construimos algo extraordinario juntos. Lo hicimos. Y ahora nos vamos a alejar de eso”.
La banda oriunda de Georgia, que completaba el guitarrista Peter Buck, fue en los tempranos ‘80 punta de lanza del denominado rock alternativo estadounidense, que en un largo proceso pasó del
underground a las masas luego del estallido del grunge a comienzos de los ‘90. Precisamente REM logró la fama mundial en 1991 cuando “Losing My Religion” tomó por asalto las radios de todo el planeta y se convirtió en un clásico instantáneo.
La banda deja un tendal de fans huérfanos y grandes canciones para el recuerdo como “Everybody Hurts”, “Is The End On The World”, “Imitation Of Life”, “Shinny Happy People” y tantas más.
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